D3 Pirámide del Uso de la Fuerza

Uso de la fuerza

La naturaleza del quehacer del personal de seguridad privada es la prevención. Las disposiciones en relación con el uso de la fuerza, van dirigidas a las fuerzas de seguridad del Estado. Sin embargo, durante el desarrollo de sus funciones de vigilancia y protección de personas, bienes e inmuebles en el ámbito privado, el agente de seguridad enfrentará situaciones en las que tendrá que recurrir al uso de la fuerza como último recurso.

El agente de seguridad privada, debe emplear los métodos y el grado de fuerza necesario a cada situación. Esto le obliga a extremar y cuidar su preparación física y técnica, a fin de hacer frente a cada problema con el éxito esperado.

Los principios que integran el método utilizado para el uso diferenciado y progresivo de la fuerza son:

  • Legalidad: Determina el marco jurídico para la aplicación de las técnicas, el mismo garantiza los derechos humanos.
  • Congruencia: Expresa el uso de la fuerza de acuerdo a la situación que se presente.
  • Proporcionalidad: Implica la aplicación de la fuerza de forma proporcional a la resistencia del ciudadano.

Pirámide del uso de la fuerza:

La siguiente pirámide del uso de la fuerza nos permitirá aplicar con éxito el uso progresivo y diferenciado de la fuerza.

• Presencia: Se refiere a la actividad preventiva por parte del agente que cumpliéndose adecuadamente, crearán un impacto positivo o negativo en personas sospechosas, por ejemplo:

  • La presentación personal y el uniforme
  • Equipo completo y en buen estado
  • Atención a lo que ocurre alrededor sin distraerse (celulares, prensa, televisión, etc.)
  • Ubicación adecuada
  • Cumplimiento de normas y procedimientos de seguridad
  • Contacto visual con personas que se conduzcan en forma sospechosa

• Comando verbal: Si la sola presencia del agente de seguridad privada no es suficiente, se debe dirigir hacia los sospechosos de manera directa, seria y con autoridad suficiente para hacerse obedecer, utilizando un lenguaje respetuoso, pero firme, a través de comandos claros.

• Contacto físico: Si lo anterior no ha dado resultado, para neutralizar acciones delictivas, se procederá a informar y solicitar apoyo inmediato, como parte del protocolo de seguridad. Debe ahora iniciar el contacto físico de manera precavida, técnica y estratégica; tratando de minimizar el riesgo que conlleva el contacto físico.

• Uso de medios no letales: Si todas las anteriores acciones no surten los efectos esperados y delante de una amenaza, se procede a la utilización de los medios no letales con los que se cuente utilizándolos de manera proporcional, los cuales pueden ser:

  • Uso del bastón
  • Gas pimiento o lacrimógeno
  • Paralizador eléctrico

• Apoyo inmediato: Como parte del protocolo de seguridad y el uso de la fuerza, el agente de seguridad privada que interviene en situaciones de riesgo, debe informar de inmediato y requerir el apoyo necesario de acuerdo a la magnitud de la situación.

• Medio de control: Si la situación persiste, se procederá a la utilización de los medios de control que permitan inmovilizar a la persona o personas (grilletes, esposas convencionales o desechables u otro medio para evitar la fuga) e inmediatamente se informa y coordina con las fuerzas de seguridad, a efecto de realizar los procedimientos adecuados.

• Uso de arma de fuego: El uso del arma de fuego es única y exclusivamente cuando los medios de disuasión y control anteriormente descritos han sido insuficientes para contrarrestar cualquier amenaza que ponga en riesgo la integridad física de su persona y/o de terceras personas a quienes protege. El agente de seguridad privada, debe informar de inmediato de su intervención a sus superiores y a la fuerza pública.


“EL ARMA DE FUEGO ES EL ÚLTIMO RECURSO A UTILIZAR EN CUALQUIER INTERVENCIÓN”.



Completar y continuar